Sinopsis: Megan es una bella heredera malcriada, apasionada de los caballos. Ambrose St. James es el Duque de Wrothston que para evitar un matrimonio obligado, decide esconderse en casa de un viejo amigo en el campo, actuando como Devlin Jefferys criador de caballos contratado por el padre de Megan.
Desde el primer momento que se vieron, surgió un gran odio entre ellos, pero la única manera de conservar el semental nuevo de Megan es mantener a Devlin y para Devlin la única diversión disponible es incordiar a Megan. Megan decide mantenerse alejada de Devlin, pero ante el rechazo de la reina de la sociedad local, la única solución parece ser casarse con alguien importante y quién mejor que el Duque de Wrothston, el único problema es coincidir con él en alguna fiesta, sin saber que sólo tiene que acudir a sus cuadras para encontrarle.
Opinión: la verdad es que cuando empecé a leer el libro no me fijé en el dato de que la historia se desarrollaba a mediados del siglo XIX. Y obviamente en esa época, había cosas que se consideraban normales o simplemente cotidianas, y ahora se ven como algo inusual. Pero en general, tengo que decir que la historia me pareció buena, aunque el principio tiene un ritmo un tanto lento, pero poco a poco le vas cogiendo el gustillo.
Nota: 7/10
20/10/2016
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